
Hemos visto claramente que el sector eléctrico del país presenta un desastre total por culpa y responsabilidad directa del gobierno, el cual por incapacidad y negligencia no ha tomado las medidas necesarias para solventar la grave situación, informó el vicepresidente del Colegio de Ingenieros de Venezuela, Ing. Ramón López.
Refirió que ha sostenido conversaciones con diversos Ingenieros especializados en el sector eléctrico, quienes han venido haciendo un seguimiento exhaustivo a lo relacionado con esa área, “y hemos concluido en que el sistema eléctrico nacional está colapsado por falta de mantenimiento, falta de inversiones, por despilfarro y corrupción”.
Por otra parte, indicó que en su condición de vicepresidente del Colegio de Ingenieros de Venezuela (CIV), ha venido alentando la reactivación de la Asociación Venezolana de Ingeniería Eléctrica y Mecánica (AVIEM). “Este organismo forma parte de las sociedades científicas adscritas al CIV, como ente asesor del Estado en materias de su competencia, tal como lo establece el artículo 22 de nuestra Ley de Ejercicio Profesional”.
-Es muy importante el relanzamiento de esta Asociación, -dijo- porque en la nueva Venezuela, que está muy cerca por venir, a sus integrantes, como expertos profesionales en la materia les corresponde un papel muy importante que desempeñar en lo que significa la reconstrucción de ese sector.
AVIEM, debe ser una Asociación que exista nacionalmente.
No voy a tratar hechos puntuales en la problemática que se presenta, pero todo el país sabe, porque lo ha sufrido, las consecuencias que traen en los hogares las abruptas interrupciones del servicio de luz eléctrica, tales como el desperfecto de los equipos electrodomésticos, neveras, lavadoras, microondas, televisores, entre otros. Casi el 80 por ciento de la población del país sufre las consecuencias de este problema.
Manifestó que “el trabajo de la Asociación Venezolana de Ingeniería Eléctrica y Mecánica (AVIEM) debe estar orientado hacia la elaboración de un diagnóstico que incluya una exhaustiva evaluación la cual permita presentar soluciones para repotenciar ese importante sector en la nueva Venezuela democrática”.
El Ing. Ramón López expuso de inmediato que “el problema radica en que en gran parte del desastre venezolano ha habido falta de Ingeniería en todos los aspectos. La Ingeniería se encuentra en todas las actividades de la vida diaria, en los centros de salud, en la vialidad, el suministro de agua, y nos encontramos frente a un gobierno sordo a las soluciones técnicas que ha presentado el Colegio de Ingenieros de Venezuela y todos sus centros y seccionales. Las cosas no han salido bien, no es por falta de talento ni profesionalismo, sino porque la prepotencia del gobierno se pone siempre de manifiesto. El régimen politizó un tema que es estrictamente técnico. Las Ingeniería es parte de la vida diaria de cualquier país. En los hospitales, desde el suministro de oxígeno a los pacientes hasta el aire acondicionado, cuando uno va a una de las pocas grandes fábricas que quedan, y se observan fallas de producción, es por falta de materia prima o porque no ha habido un suministro eléctrico adecuado. Cuando se ve que en los hogares hay deficiencias en el servicio eléctrico, esto tiene su origen en la falta de inversión y mejora en el servicio”.
Este gobierno –precisó- le tiene menosprecio al talento y profesionalismo venezolano. Buscaron Ingenieros de otras latitudes, sin conocimiento de nuestra realidad y muchos otros aspectos, y terminaron colapsando al país. Aquí también se presenta el fenómeno de que se gerencia por crisis, porque no existe la planificación, no ha habido una conducta coherente que conduzca por una sola línea, y se gerencia por crisis, porque acabaron con los reales y se corrompieron.